La ansiedad social es un trastorno que se caracteriza por un miedo intenso y persistente a las situaciones sociales.
Concretamente, la persona, cuando está en grupo, se siente observada, evaluada o juzgada por los demás.
Este miedo suele ir acompañado de síntomas físicos como sudoración, palpitaciones, temblores, náuseas o dificultad para hablar.
Evidentemente, la ansiedad social afecta negativamente a la calidad de vida de una persona, limitando sus relaciones, su rendimiento académico o laboral, etc.
La baja autoestima es una de las causas más frecuentes de la ansiedad social.
Digamos que la baja autoestima puede generar pensamientos irracionales y distorsionados sobre cómo nos perciben los demás.
Para contrarrestar la ansiedad social, te recomendaría trabajar la visión que tienes de ti mismo/a, para que llegue a ser realista y equilibrada.
Desde luego, una autoestima positiva te ayudará a sentirte más confiado y seguro en las situaciones sociales.
«¿Cómo puedo saber si tengo ansiedad social?»
Para saberlo, puedes realizar alguno de los tests que existen. Uno de los más utilizados es el Test de Ansiedad Social de Liebowitz (LSAS), que evalúa el nivel de ansiedad y de evitación que experimentas en diferentes situaciones de la vida cotidiana.
Puedes acceder a este test en el siguiente enlace: Test de LSAS.
Este test es orientativo y no sustituye el diagnóstico profesional. (Si crees que puedes tener ansiedad social, no dudes en consultarme.)
Ahora bien, ¿cómo desarrollar una autoestima positiva para contrarrestar la ansiedad social?
A continuación te presento cinco estrategias.
1. Identifica y pon en cuestión tus pensamientos negativos
Los pensamientos negativos son aquellos que nos dicen que no somos lo suficientemente buenos, que vamos a fracasar, que los demás nos van a rechazar o que no merecemos ser felices.
Estos pensamientos suelen ser automáticos (es decir que aparecen sin que nos demos cuenta).
Para desarrollar una autoestima positiva, es importante identificar estos pensamientos negativos y cuestionarlos con evidencias objetivas. Por ejemplo, si piensas que nadie te va a querer porque eres tímido, pregúntate: «¿Qué pruebas tengo de que eso sea cierto? ¿Conozco a alguien que sea tímido y tenga amigos o pareja? ¿Qué otras cualidades tengo que puedan hacerme atractivo para los demás?»
Al hacer estas preguntas, te darás cuenta de que tus pensamientos negativos no se basan en la realidad, sino en tus propias creencias e interpretaciones.
2. Reconoce tus cualidades
Otra forma de mejorar tu autoestima consiste en reconocer y valorar tus cualidades. A menudo tendemos a centrarnos en lo que hacemos mal, y nos olvidamos de lo que hacemos bien. Esto nos genera una imagen distorsionada de nosotros mismos, que nos hace sentir inferiores.
Para evitar esto, haz un balance de tus cualidades, por pequeñas o insignificantes que te parezcan. Por ejemplo, puedes hacer una lista de las características positivas que tienes (como ser amable, honesto, creativo, etc.).
También puedes pedirle a alguien de confianza que te diga qué le gusta de ti o qué admira de ti.
Al hacer esto, te darás cuenta de que tienes muchos motivos para sentirte orgulloso de ti mismo.
Estas dos últimas estrategias son cognitivistas. Personalmente, no estoy en el cognitivismo, pero las evoco porque son básicas.
Si crees en el poder de la razón (que no niego), adelante: hazte las preguntas (estrategia 1), haz una lista con tus cualidades (estrategia 2)…
Si no, pasa a los puntos siguientes.
3. Practica el autocuidado
El autocuidado es el conjunto de acciones que realizamos para cuidar nuestra salud física y mental. El autocuidado implica atender nuestras necesidades básicas (como dormir bien, alimentarnos adecuadamente, hacer ejercicio, etc.), pero también nuestras necesidades emocionales (como expresar nuestros sentimientos, relajarnos, divertirnos, etc.)
Practicar el autocuidado es una forma de demostrarte respeto y amor a ti mismo, lo que contribuirá a mejorar tu autoestima. Por supuesto, el autocuidado te ayudará a sentirte mejor en tu cuerpo y en tu mente, por lo que te capacitarás para afrontar las situaciones sociales.
4. Establece metas realistas y desafiantes
Otra estrategia para desarrollar una autoestima positiva es establecer metas realistas y desafiantes que nos permitan crecer como personas. Las metas son los objetivos que nos proponemos alcanzar en algún ámbito de nuestra vida (como el académico, el laboral, el personal, etc.).
Establecer metas realistas significa que sean acordes a nuestras capacidades y recursos, es decir, que no sean ni demasiado fáciles ni demasiado difíciles. Establecer metas desafiantes significa que nos supongan un reto, es decir que no sean algo que ya sabemos hacer.
Al establecer metas realistas y desafiantes, te motivarás a salir de tu zona de confort y a aprender cosas nuevas. Además, cuando logres tus metas, aumentarás tu confianza y autoeficacia, es decir, tu creencia en tu capacidad para hacer las cosas bien.
5. Busca apoyo social
La última estrategia para mejorar la autoestima consiste en buscar apoyo social. El apoyo social es el conjunto de recursos emocionales, materiales o informativos que nos brindan las personas con las que tenemos una relación afectiva (como la familia, los amigos, la pareja, etc.).
El apoyo social nos ayuda a desarrollar una autoestima positiva porque nos hace sentir queridos, valorados y aceptados por los demás. También nos ayuda a afrontar los problemas o dificultades que podamos tener.
Además, cuando estamos en companía de una persona de confianza, tenemos la posibilidad de compartir nuestras alegrías y éxitos, lo que aumenta nuestro bienestar y nuestra autoestima.
Para encontrar apoyo social, debes contactar con las personas que te importan y que te hacen sentir bien. También puedes buscar apoyo social participando en actividades grupales que te interesen (como un curso, un club, un voluntariado, etc.)
En resumen
La ansiedad social es un trastorno que se caracteriza por un miedo intenso y persistente a las situaciones sociales. La baja autoestima es una de sus causas más frecuentes.
Para contrarrestar la ansiedad social, es fundamental desarrollar una autoestima positiva.
En este artículo te he presentado cinco estrategias para mejorar tu autoestima: 2 cognitivistas y 3 centradas en la acción.
Espero haberte ayudado a sentirte mejor contigo mismo y… con los demás.
